domingo, 16 de noviembre de 2014

15 DETÉNGASE EN LA CUNETA

16 de Noviembre de 2014, Swakopmund, Namibia

15 DETÉNGASE EN LA CUNETA

Circulábamos a velocidad crucero por la carretera de asfalto que va de Windhoek a Opuwo, al norte de Namibia, Conducía Josefina, día soleado, carretera recta interminable, modorra. De repente suena el teléfono en el que habíamos metido una tarjeta SIM del país. ¿Quién nos puede llamar?.
-Hola, ¿Quién es?
-Detenga la marcha y aparque en el arcén.
Me quedo perplejo. Al instante aparece un coche blanco por la derecha, en Namibia se conduce por la izquierda, que nos adelanta; en su interior veo las caras de Carmen y Nel. Éste riéndose a todo trapo.
Se trataba de dos amigos que viven en Windhoek. El azar ha hecho que coincidamos en la carretera. Paramos y charlamos un ratillo. Tenemos el mismo destino y quedamos en vernos esa tarde.
Parece mentira que sucedan estas carambolas en un país que es una vez y media más grande que España. Esa tarde/noche cenamos con ellos en Opuwo, ciudad de mucho colorido donde se ven a las mujeres y hombres de la tribu Himba, Herero y otras más de cuyo nombre no me acuerdo. En este sitio hay mucho ambiente. Las paisanas van con el pecho al descubierto, la piel y el cabello embadurnados de barro rojo y la parte baja cubierta con piel de cabra. Estas son las himba, las herero van con vestidos de la época victoriana y con un sombrero muy llamativo. Un espectáculo, porque no se trata de ponerse folklóricas para sacarle las perras a los turistas a cambio de unas fotos, van ataviadas de esa forma porque es su manera natural de vestir. Opuwo nos sorprendió gratamente.
Hereros
Himbas

Zemba


Otro encuentro:
Esta vez circulábamos hacia el sur, dirección Sesfontein. Era pista. Nos sigue un todoterreno, me aparto para que me adelante, sigue detrás, yo sigo a mi velocidad (rapidito). Al final se pone a nuestro lado y me hace señas para que pare. Los dos nos detenemos en la cuneta y él sale disparado hacia mí.
-Soy Enrique, ¡el que vive en Upington!
-¡Lo sabía, lo sabía!
Era un “ciber-amigo” con el que había contactado para encontrarnos en su lugar de residencia, Upington, Sudáfrica. Nosotros teníamos previsto pasar por allí a primeros de Diciembre y quedar con ellos, su mujer se llama Sonia, para que nos dieran información y consejos sobre Sudáfrica. Resulta que Enrique circulaba en sentido contrario dirección Epupa Falls, cataratas situadas al norte de este país, frontera con Angola. Él, que ya nos conocía de Internet por haber hojeado nuestro blog, cuando vio una furgoneta color naranja matrícula española lo tuvo claro. “tienen que ser los españoles del blog”, pensó. Dio la vuelta y nos alcanzó para saludarnos. Yo también caí al ver un coche con matrícula sudafricana que nos pedía que paráramos. “Este tiene que ser Enrique”, pensé mientras me detenía. Un puntazo habernos conocido. Quedamos en seguir en contacto a través de Email para quedar en Upington. Nos encanta conocer a gente española que vive en estos países porque te cuentan cosas interesantes de la zona, cómo viven; también te dan información y consejos muy útiles.


Grabados rupestres cerca de Sesfontein. Namibia


Sufriendo



1 comentario:

  1. No todos los días se encuentra uno en Namibia, en mitad de la carretera, a unos amigos recientes repartiendo butano por las aldeas.
    Ha sido un placer conoceros, a vosotros y a vuestros invitados. Ya sabéis dónde estamos.
    Carmen y Nel

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